suicidas

Más que preguntarse porque la gente se suicida, debemos preguntrnos por que dada las condiciones de este mundo, porque no se suicida más gente; mas que buscar motivos para vivir, habria que indagar en los motivos para morir.

En la pelicula Martin(h) de Adolfo Aristarain, que les recomiendo la vean en dvd, está la novia de Martín padre, que es pura vitalidad, cada movimiento es sensualidad, poesía, sentido del humor, gracia. Ella está abierta y como tal expuesta a todo el dolor, como salir a correr en pelotas en el polo norte, eso hace ella, no tiene protección y es víctima de todas las calamidades a la que es sometida por el hijo de puta de Martin (Luppi). El dolor llega a ser tan extremo que el suicidio actúa como la forma más natural de detener tanto dolor sicológico.

Todos los suicidas que he conocido, no eran depresivos, una forma que tiene el sistema de ordenar su propio caos, no tenían problemas económicos, digamos muy serios y eso si, les pasaba como a la novia de Martín, había nacido con algún defecto genético por el que no tenía piel emocional para filtrar a los manipuladores y pesados.

Lamentablemente no conozco a ningun manipulador o pesado que haya cometido suicidio, sí hacen suicidar a los demás, son perseguidores por naturaleza y para ello he nacido yo, un asesino serial que se encargará de equilibrar las cargas y hacer algo en lo que la naturaleza ha fallado, seguramente porque hace millones de años eran necesarios para la evolucion los pesados, los cabrones, los manipuladores; hoy ya no, son una carga para la especie humana que está por dar el salto que anunció Zaratustra.

Yo soy un mensajero de los dioses y me importa poco que me crean o no, por todo ello, a mis víctimas les leeré el Zaratustra, solo un parrafo antes del sacrificio final que la naturaleza pide a gritos.

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