domingo, abril 28, 2019

Lobotomizadores de homosexuales


En 1975, la educación estaba en manos de lobotomizadores, novedosos métodos proponía para curar la homosexualidad los doctores Márquez, rector interino de la Universidad de Buenos Aires y siquiatra del Hospital Militar y el Dr. Julio Lyonet, rector de la UNBA.
Uno diagnosticaba y el otro amputaba, dice la revista Somos del Frente de Liberación Homosexual  de agosto de 1975.

34 rumanos que me leen

24 lectores rumanos. 25 de los Emiratos Árabes Unidos y 32 de Estados Unidos. Apenas cinco de España. Alguien puede explicarme estos resultados de mis lectores?
Rumanos, norteamericanos, irlandeses están invitados a comentar, el que lo haga le enviaré un libro mío en formato pdf.

How to read while you sleep

It is an app in alpha mode, for now only for Android operating system, which reads you a book while you are sleeping. The thing is more complex, the application comes with a sensor, which at the moment only they sell it, and that measures the alphas waves of the brain, then when it detects deep sleep just there it begins to read the book. As soon as it detects that you are abandoning the alpha mode, it stops reading and resumes when it detects again the waves related to deep sleep.

The alpha mode of the Redream application is currently downloaded as KDP and is by request to the company. If you're interested in being a laboratory rat for this experiment write here.

Cómo leer libros mientras dormís


Se trata de una app en modo alfa, por ahora solo para sistema operativo Android, que te lee un libro mientras estás durmiendo. La cosa es más compleja, la aplicación viene con un sensor, que por el momento solo lo venden ellos, y que mide las ondas alfas del cerebro, entonces cuando detecta sueño profundo recién ahí comienza a leerte el libro. Apenas detecta que estás abandondando el modo alfa deja de leer y retoma cuando vuelve a detectar las ondas relacionadas con el sueño profundo.
El modo alfa de la aplicación Redream por el momento se baja como KDP y es por solicitud a la empresa. Si te interesa ser rata de laboratorio de este experimento escribir aquí.

La revolución permanente feminista


Hay un claro cambio de paradigmas (toso un poco de nerviosismo, pánico escénico), en una palabra el feminismo esta quebrando costumbres y hasta le ha dado batalla al elefante blanco de la RAE y uno de sus mancebos, escritores de espadachines y nacionalismos quevedianos ha salido a decir que no, que no, que el va a seguir con su gramática ptolomeica.
Lo que yo siempre he querido ser es convertirme en lenguaje, palabras y no sería mala opción en esa cosa extraña que son los sueños donde no sabemos como se articula lo que sea (Facundo Manes ya nos dirá que pasa en los sueños).
Volvamos, y estoy en cada palabra, intentando no caer en lo que tanto molestaba a Nietsche, eso de estar siempre en sincronía con la mass media, con el mainstream, no hablar por miedo a que me escrachen o lo peor buscando afanosamente el aplause.
¡Que revolución se han mandado!, yo estoy haciendo la mía, y es una mezcla de antipatriarcado, libertad, tolerancia, "no a la desesperación", lucidez, imaginación, la revolución de la pregunta, la revolución de que lo imaginado va y viene, entra al mundo, sale de él y vuelve a entrar.
Señoras y señores buenas noches (op no se cómo se dice).

sábado, abril 27, 2019

El estadio de los espejos

Imagen choreada y retocada de https://www.cronista.com/we/Libros-politicos-todo-vale-para-un-candidato-en-campana-20110520-0006.html


A Pr  que me ayudó a escapar del valle de los espejos


Cuando hace un tiempo corregí un libro, esa persona me decía: lo que quiero es impresionar.
Y cuando un político decide escribir un libro lo hace con una finalidad distinta a la de un escritor, de un suicida o de un mortificado adolescente que lleva un diario secreto. Lo mueve impresionar. El libro es una palanca que abrirá algo y hay un "yo se que vos pensas, que yo pienso que vos querés que yo piense...", es como un reino de la obviedad, tanto emisor como receptor, saben que ese libro tiene ese pequeño y miserable fin y por tal motivo los libros de los políticos suelen terminar en las mesas de oferta o en la segunda guerra mundial.
Señor Juez:
Lo mismo vale la pena leerlo, aclaro.